elmundo.es - Preguntas y respuestas <BR> sobre el cónclave
PROCESO DE ELECCIÓN DEL PONTÍFICE
Preguntas y respuestas
sobre el cónclave
RAQUEL QUÍLEZ
MADRID.-
El 18 de abril comienza el cónclave del que saldrá el sucesor de Juan Pablo II. Los cardenales menores de 80 años podrán elegir con su voto a la nueva cabeza de la Iglesia Católica en un proceso planificado al milímetro. Siga todas las claves. 1. ¿Qué es el cónclave? | 2. ¿Dónde se celebra? | 3. ¿Quiénes son los electores? | 4. ¿Quién puede ser elegido? | 5. ¿Qué respaldo necesita el nuevo Pontífice? | 6. ¿Cómo será la votación? | 7. ¿Qué es la fumata blanca? | 8. ¿Qué sucede cuando un candidato obtiene el respaldo necesario?
El Cónclave es la reunión del Colegio Cardenalicio en periodo de Sede Vacante -es decir, cuando la Iglesia no está encabezada por un Pontífice- para elegir un nuevo Papa. El cónclave del que saldrá el sucesor de Juan Pablo II comenzará el lunes 18 de abril a partir de las 16.30 horas. Tras una misa pública en la Basílica de San Pedro, los purpurados se trasladarán hasta la Capilla Sixtina, donde se harán las votaciones. Subir
Por primera vez, el cónclave extenderá su radio de acción a casi todo el Estado Vaticano. Y es que los cardenales deliberarán y votarán en la Capilla Sixtina, pero se alojarán en la moderna residencia de Santa Marta, un edificio que el propio Wojtyla ordenó remodelar.
Una vez por la mañana y otra por la tarde, los purpurados se desplazarán hasta la Capilla.
Capilla del Hospicio de Santa Marta. (Foto: REUTERS)
En los cónclaves anteriores, los cardenales estaban "encerrados" en las monumentales habitaciones cercanas a la Capilla Sixtina. Eran dormitorios separados por mamparas, sin duchas y con las ventanas selladas. Un auténtico suplicio para los más mayores. Subir
En el cónclave pueden votar todos los miembros del Colegio Cardenalicio menores de 80 años. Según la norma vaticana, serían 117 los purpurados que tienen la potestad para hacerlo (58 europeos, 14 norteamericanos, 22 latinoamericanos, 11 africanos, 12 asiáticos y dos de Oceanía). Sin embargo, el filipino Jaime L. Sin y el mexicano Alfonso Antonio Suárez Rivera no acudirán por motivos de salud, por lo que los electores se reducen a 115. Subir
Pueden votar los cardenales menores de 80 años. (Foto: AP)
Cualquier varón mayor de 30 años y bautizado puede ser designado Papa, aunque si el elegido "no tiene el carácter episcopal, ha de ser ordenado Obispo inmediatamente", según establece la Constitución apostólica Universi Dominici Gregis de 1996. Al margen de la teoría, lo habitual es que el elegido sea un cardenal. Urbano VI, en 1378, fue el último Papa que no tenía este cargo. Con anterioridad, también hubo laicos, como Juan XII (955), o León VIII (963), que fueron elegidos Pontífices.
En los últimos meses, ha habido nombres que han sonado con más fuerza que otros como posibles sucesores de Juan Pablo II. Joseph Ratzinger, Francis Arinze o Claudio Hummes son algunos de los favoritos. Sin embargo, el dicho vaticano advierte de que "quien entra Papa en el Cónclave, sale cardenal". Subir
Para que la elección del Papa sea válida, se requieren los dos tercios de los votos de los cardenales presentes en el cónclave. En la tarde del día 18 podría realizarse la primera votación. Si de ella no sale un nuevo Pontífice, el escrutinio se repetirá en los días posteriores, dos por la mañana y dos por la tarde.
Si transcurriesen tres días de escrutinios (un total 12 votaciones) sin resultados positivos, se suspenderá el proceso durante un día para que los cardenales oren y debatan. Después, se celebrarán otros siete escrutinios y se descansará otro día. Este ciclo de siete votaciones podría repetirse hasta dos veces.
Si aún así los cardenales no han alcanzado el consenso, la Constitución Apostólica de Juan Pablo II establece que podrán, o bien seguir votando sobre la base de la mayoría de dos tercios, o bien decidir, por mayoría absoluta, cambiar el sistema de voto. En este caso se les presentan dos opciones: nombrar al Papa por mayoría absoluta de los electores presentes en el Cónclave o elegirlo, también por mayoría absoluta, entre los dos candidatos más votados.
Antes de que Juan Pablo II instaurase esta novedad, tenía que designarse al líder de la Iglesia siempre por mayoría de dos tercios. Tras el cambio en la "normativa", podría darse el caso de que un grupo de 58 cardenales -menos de los dos tercios requeridos- bloquease el cónclave para llegar al final, forzar el cambio en el sistema de votación y así nombrar Papa a su candidato con mayoría abosulta. Subir
Estufa en la que se quemarán las votaciones. (Foto: AP)
A cada cardenal se le entrega una papeleta con la inscripción "Eligo in summum pontificem" (Elijo como Sumo Pontífice) y un espacio para escribir su propuesta. Cada uno llevará su voto, de forma bien visible, hasta una urna y, delante de los escrutadores, pronunciará el juramento: "Pongo por testigo a Cristo Señor, el cual me juzgará, de que doy mi voto a quien en presencia de Dios, creo que debe ser elegido".
Durante las votaciones, los electores deben estar solos en la Capilla Sixtina, por lo que inmediatamente después de distribuir las papeletas, el secretario del Colegio de los Cardenales, el maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias y los ceremonieros, que estaban en la sala, deben salir de ella.
Terminada la votación, tres escrutadores comenzarán el recuento, sumarán los votos y los anotarán en una hoja. El último perforará las papeletas con una aguja, justo a través de la palabra "Eligo", y las insertará en un hilo. Sigue después la tercera y última fase, llamada post-escrutinio, en la que se recuentan, cotejan y queman las papeletas.
Efectuadas la votación y el recuento, las papeletas de los cardenales se queman en una vieja estufa de hierro, cuyo humo saldrá por una chimenea instalada en la Capilla Sixtina. Si algunos de los candidatos ha obtenido la mayoría necesaria y, por tanto, es elegido Papa, saldrá humo de color blanco: la fumata blanca. Si, por el contario, la votación no ha tenido éxito, el humo será negro, la llamada fumata negra.
Durante el tiempo que dure el cónclave se harán dos fumatas diarias. Y es que si en la primera votación de la mañana o la tarde no sale un nuevo Papa, se procederá de forma inmediata a la segunda y se quemarán juntos los votos de ambas. Subir
En el interior de la Capilla Sixtina, el ritual establece que el Cardenal Decano, Joseph Ratzinger debe pedir su consentimiento al elegido en nombre de todo el Colegio. "¿Aceptas tu elección canónica para Sumo Pontífice?" dirá. Cuando éste dé su consentimiento, se le preguntará con qué nombre quiere ejercer su Pontíficado y el Maestro de Ceremonias levantará acta.
Entonces, todos los cardenales se arrodillarán ante el nuevo Papa, que se dirigirá a la ventana central de la Basílica de San Pedro para bendecir a los fieles. Minutos antes, como marca la tradición, el cardenal protodiácono, el chileno Jorge Medina Estévez, cumplirá su tarea de hacer el anuncio oficial: "Annuntio vobis gaudium magnum Habemus Papam". Subir